Suena el oleaje del mediterráneo, en esta población que ha sabido conservar su espíritu marinero como ninguna otra. En sus playas y calas –auténticos paraísos escondidos de todo– suena el silencio, la calma y la tranquilidad. Y también suena la música en las noches de verano, con su tradicional Cantada de Habaneras y el prestigioso Festival de Cap Roig, dos citas que en este escenario de gran belleza se convierten en una experiencia imprescindible.